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#Ferias y eventos
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Perfectamente imperfecto: dos exposiciones en el museo Holon del diseño celebran el daño colateral del diseño
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Las cintas de acero bermellonas que mueven en órbita alrededor del museo Holon del diseño aparecen desafiar la construcción, así que en desacuerdo son ellas a la noción de un monumento robusto, intemporal.
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Pero el museo es hoy cinco años en su arrendamiento pues el escaparate primero del diseño de Israel.
Está con una dosis de la compasión, después, que el museo pone en marcha de su programa del resorte, de un tributo a de ensayo y del error en diseño - o, si no el error exactamente, después los hombros metafóricos en los cuales algunos gigantes del diseño ahora se colocan. Como un museo evolutivo que engañe en muchedumbres con los restos de ésos impropios para la supervivencia, Holon ofrece una demostración que clava de qué pudo haber sido pero era, alas, no.
el diseñador Jerusalén-basado que Yaacov Kaufman pone título a la exposición “exonera el vientre”, acarreando en 300 experimentos y also-rans creados durante ocho años. El guardián Galit Gaon compara los pedazos a los miembros de una tribu, aunque ilustran no un triunfo pero los medios a uno, un proceso creativo. Cada taburete es una mutación leve del último - “como la animación producida al mover de un tirón un libro del tirón,” dice Gaon. Demuestran el laboriousness y el multidimensionality del diseño - particularmente de un objeto que sea tan duro conseguir correcto.
Aún más extenso es “En-Posible”, coproducido por el museo de Alessi, que destaca las ofertas dañadas, intocables, extintas por las cuales nunca alcanzó la producción - aún menos la inmotalidad alcanzada así que muchos diseños de Alessi. El guardián Francisca Appiani presenta 50 ofertas condenadas sometidas durante nueve décadas, por los diseñadores ninguÌn menos talentoso que la lumbrera Felipe Starck de Patricia Urquiola, de Ettore Sottsass y de Alessi. “Fueron seleccionados de un grupo mucho más grande de diseños igualmente nonatos,” dice a presidente Alberto Alessi de la compañía, con el propósito de acentuar el eclecticismo y la liberalidad cultural de nuestra actividad como fabricantes. '
Los bosquejos, las simulaciones y los prototipos ponen pelado el diálogo entre el diseñador y el fabricante para arriba hasta el veto inevitable. “A menudo su ejecución presentó dificultades insuperables, menos su coste era con frecuencia demasiado alto, nuestra compañía era a veces demasiado tímida introducirlas en el mercado,” dice Alessi. “Solamente casi no hay diseño intrínseco demasiado débil.” Quizás habrían hecho productos desastrosos, pero los restos hacen la visión excelente, como una casta particularmente fracasada de la bestia. Son también un recordatorio excelente que nadie - no incluso Patricia Urquiola - es perfecto.